COBAYA

Estos son animalitos con características extremadamente sociables, aunque puedan parecer algo asustadizos en primer lugar. En inicio puede costarles confiar, pero luego resultan extremadamente cariñosos. Podemos contarte cuáles son las distintas características del comportamiento, así como el cuidado de las cobayas. Puedes aprender más sobre cómo se cuidan estos simpáticos animalitos. A continuación te decimos todo lo necesario para hacer feliz a tu cobaya.

Una cobaya, o el cobayo, es un animal roedor perteneciente a la familia de cávidos, puede provenir de los Andes Americanos del Perú o Bolivia. Puede tratarse de roedores o herbívoros de tamaños pequeños y medios, así como de carácter sociable o cariñosos, a pesar de esto pueden ser desconfiados en inicio. Podemos contarte las características, así como las curiosidades de una cobaya.

¿Cuáles son las características de una cobaya?

Como mencionamos, son pertenecientes a la familia de los cávidos o cavídos, estos son caracterizados por disponer de formas de cabezas rectangulares grandes, y colas que no son visibles, pero que se notan al tacto como pequeñas extensiones de su columna. Pueden ser muy distintos dependiendo de la raza de la cobaya y tendrá distintos tamaños; el peso de estos animales en su momento adulto puede llegar a los 1,200 gramos.

Las cobayas disponen de 4 dedos en sus manos, así como de 3 dedos en sus pies, tienen uñas largas y huecas, que pueden apreciarse en forma de tubos; será necesario que se las corten de forma periódica con tijeras de uñas de animales pequeños.

Igual que con los perros, debemos tener cuidado a la hora de cortar sus uñas, porque las cobayas tienen una vena en el interior de su uña, que puede llegar a sangrar demasiado si se corta donde no es debido.

Como se trata de roedores, pueden tener de forma única los 4 incisivos, dos debajo y dos arriba. A diferencia de los hámsters, tienen dientes blancos y disponen de múltiples molares que no son visibles. De forma aparente pueden rozar en la zona superior del cuello de estos animales. Los dientes de una cobaya, así como los otros roedores o lagomorfos, pueden no dejar de crecer en su periodo de vida; por este motivo, los productos con base de heno que tengan hebras largas pueden resultar muy útiles dentro de su cuidado.

¿Cómo acostumbra comportarse una cobaya?

Una cobaya es un espécimen de origen gregario, esto significa que sus preferencias de vida son en comunidad, en compañía de otros individuos de su especie. Naturalmente, suelen vivir en comunidades que van de los 5 hasta los 10 individuos. Por este motivo, pueden ser felices si conviven con otros individuos de su especie, debido a su carácter social.

Más allá de eso, también son seres demasiado territoriales, por lo que deben tener mucho cuidado en el momento de asignarles un compañero.

A pesar de que en su entorno salvaje estos animales son muy activos durante la noche y en el día, en su ámbito doméstico pueden acostumbrarse a los horarios de su dueño, de esta forma mantendrán una vida totalmente diurna. Estos pequeños resultan muy afectuosos, así que necesitan mucha atención por parte de los dueños.

Pueden ser considerados como animales que tienen un solo dueño, por lo que probablemente puedan mostrar mucho más afecto con sus mimos hacia una sola persona, que pueda ser considerada como un miembro más de su comunidad. Son muy desconfiados con las personas con las que no tenga un trato habitual.

Estos animales disponen de una alta capacidad para aprender, así que pueden llegar a memorizar distintos trucos, como dar sus patitas, o giros, aunque por lo general necesitan incentivos, como la comida, para que lo hagan a gusto.

Pueden emitir ruidos parecidos a onomatopeyas, son similares a “cuy cuy”; este efecto sonoro es el origen del que proviene el nombre de Cobaya en Latinoamérica. Los sonidos que emiten pueden ser considerados como su manera de comunicación, y pueden tener distintos significados. Son sonidos agudos que pueden derivar en necesidad de ser atendidos, miedo, tener hambre o enfado.

Cuando una cobaya es acariciada, también suele ronronear, en los casos en los que se les rasque o se les haga mimos; y pueden sentirse muy a gusto con su persona de preferencia.

A pesar de que muchas personas lo crean así, una cobaya no es la mascota ideal para que un niño la tenga en su posesión, ya que requerirá de varios cuidados y la responsabilidad de un adulto.

¿Cómo alimentar una cobaya?

Una cobaya es un roedor de funcionamiento digestivo herbívoro de arrastre, por lo que el heno resulta muy importante dentro de su dieta. Las cobayas pueden comer mucho heno de forma continua para que su sistema digestivo funcione correctamente, por este motivo la henera debe mantenerse llena todo el tiempo.

Estos animales también dependen en grandes cantidades de consumo de vitamina C, que resulta esencial para su funcionamiento. El organismo de las cobayas no puede sintetizarla, de la misma forma en la que los seres humanos tampoco lo hacemos.

La mejor forma de mantener sanas a nuestros cobayas con vitaminas es con la alimentación del pimiento, de forma especial el pimiento rojo, porque puede tener una gran cantidad de vitamina C, por este motivo debe ser consumido diariamente, en cantidades que sean adecuadas. Una tirita de pimiento una vez al día puede ayudar mucho al animal.

El consumo de vitamina C, puede ayudar en el crecimiento capilar de una cobaya. Una cobaya que tiene buena alimentación tendrá mucho pelo en la parte superior de las manos, así como de los pies y detrás de las orejas.

Las cobayas pueden ingerir mucha fruta fresca, en cantidades pequeñas, siempre sin pepitas o huesos. El exceso de azúcares puede perjudicar gravemente la salud de los roedores.